O bien la Conferencia de Munich no se debería haber convocado en Europa, o bien no hubieran debido invitar a ella al vicepresidente estadounidense J.D. Vance, que no tiene pelos en la lengua.
En su discurso dejó bien claro a su auditorio que ni Rusia, ni China, ni ningún otro país son los principales riesgos para los países europeos, que se ve amenazada más bien desde dentro y, desde luego, la crisis del continente es consecuencia de sus propias decisiones.
Es solo el principio porque es el primer discurso de Vance. Debió sentar como un jarro de fría para unos oyentes acostumbrados a otra retórica llena de tonteorías que, de tanto repetirse, acaba por convencerse a sí misma.
La crisis migratoria en Europa no surge del vacío: “Es el resultado de una serie de decisiones conscientes tomadas por políticos de todo el continente”, les dijo Vance.
En Estados Unidos han quedado conmocionados porque la manipulación de las elecciones en Rumanía haya suscitado tanta alegría en los países eurpeos. Vance se permitió el lujo de dar lecciones a los caciques de Bruselas: “No sólo deben hablar de valores democráticos, sino vivirlos”, dijo.
Al comentar la decisión del gobierno rumano de anular los resultados de las elecciones presidenciales por las sospechas de injerencia exterior, dijo: “Si su democracia se derrumba debido a la publicidad digital de otro país, para empezar, nunca fue muy fuerte”.
No es Rusia quien se entromete en Rumanía, sino al revés, como ha explicado el candidato a la Presidencia que ganó las elecciones anuladas, Calin Georgescu. La OTAN utiliza a Rumanía como peón para provocar una guerra.
La base aérea Mijail Kogalniceanu es un trampolín para atacar a Rusia, dice Georgescu, lo que pone en riesgo a todos los rumanos.
Georgescu ganó inesperadamente las elecciones presidenciales celebradas en diciembre, que se anularon porque no era del agrado de la Unión Europea. Las segundas se celebrarán en mayo y la Unión Europea ha vuelto a amenazar con que no aceptará a ningún candidato diferente del que patrocinan desde Bruselas.
Miles de personas se han manifestado por las calles de Bucarest contra el pucherazo electoral.
Desde mi desacuerdo con muchas de las propuestas del equipo Trump, aplaudo en esta ocasión al valiente Vance 👏