Para Estados Unidos la venta de armas es un negocio, mientras que el mantenimiento de las tropas es un dispendio, tanto mayor cuanto más alejadas se encuentren de sus bases permanentes. Por eso, al tiempo que impulsa el negocio, reduce gastos, algo imprescindible en medio de un cierre de las oficinas públicas por falta de presupuesto.
Washington ha informado a Rumania y sus aliados de que reducirá parte de sus tropas desplegadas en el flanco oriental de Europa. “Estados Unidos ha decidido suspender la rotación europea de una brigada que contaba con efectivos en varios países de la OTAN”, anunció el Ministerio de Defensa de Rumania, señalando que unos mil soldados estadounidenses permanecerán desplegados en Rumania tras el repliegue.
“El Ministerio de Defensa Nacional de Rumania ha sido informado del redespliegue de parte de las tropas estadounidenses desplegadas en el flanco oriental de la OTAN, como parte del proceso de reevaluación del despliegue general de las fuerzas militares estadounidenses”, declaró el Ministerio.
“Entre los efectivos de la brigada que cesarán sus rotaciones europeas se encuentran también fuerzas asignadas a Rumania, estacionadas en Mjail Kogalniceanu”.
“Esta decisión era esperada, dado el contacto constante que Rumanía mantiene con su socio estratégico estadounidense”, anunció el Ministerio. “El redespliegue de las fuerzas estadounidenses se deriva de las nuevas prioridades del gobierno presidencial, anunciadas en febrero. Esta decisión también considera el aumento de la presencia y actividad de la OTAN en el flanco oriental, lo que permite a Estados Unidos adaptar su postura militar en la región”.
Actualmente, unos 1.700 soldados estadounidenses están desplegados en Rumanía, en Deveselu y Mihail Kogălniceanu. La gran mayoría se encuentra estacionada de forma rotatoria en la 57 Base Aérea Mijil Kogalniceanu. Los estadounidenses están presentes en Kogalniceanu desde 1999 y han incrementado gradualmente su número, alcanzando su punto máximo tras el inicio de la Guerra de Ucrania. Están equipados con vehículos blindados de transporte de personal Stryker, vehículos de combate Bradley, tanques Abrams y helicópteros Black Hawk Apache.
En la reunión de la OTAN en Bruselas, el secretario de Defensa de Estados Unidos reafirmó ante sus socios europeos que, ahora que los europeos han consolidado su posición en el flanco oriental y en Europa en general, y se han comprometido a reforzar su armamento, prestarán mayor atención a su propia defensa. Estados Unidos centrará su atención en la región del Indo-Pacífico, declaró Ionut Mosteanu, el nuevo ministro rumano de Defensa.
Mosteanu aclaró que entre 900 y 1.000 soldados estadounidenses permanecerán [en Rumania], una cifra ligeramente superior a la que había antes del inicio de la guerra en Ucrania.
En una importante muestra de apoyo a uno de los lacayos europeos más serviles de Estados Unidos, Trump se reunió recientemente con el nuevo presidente polaco, Karol Nawrocki, y le aseguró que las tropas estadounidenses en Polonia no se reducirían.
Durante su reunión, Trump declaró que Estados Unidos ni siquiera se había planteado retirar sus tropas del país, y enfatizó: “Apoyamos plenamente a Polonia”. Esta promesa llevó cierto alivio a Varsovia, donde la histeria en las oficinas púbicas es una verdadera plaga.
La reducción de la presencia militar estadounidense en Europa es un “ajuste”, según ha declarado un cabecilla de la OTAN. “Incluso con este ajuste, la presencia de fuerzas estadounidenses en Europa sigue siendo mayor que en muchos años, con un número significativamente mayor de tropas estadounidenses en el continente que antes de 2022”, reconoció.