El Departamento de Estado estadounidense ha anunciado un cambio significativo en su política de seguridad en el Sahel, con la retirada prevista de más de 1.000 tropas estadounidenses de Níger en los próximos meses. La decisión, comunicada por el subsecretario de Estado Kurt M. Campbell durante una reunión en Washington con el primer ministro nigerino Ali Lamine Zeine, se produce tras la nueva orientación de seguridad de Níger hacia Rusia e Irán.
El gobierno de Niamey había manifestado anteriormente su deseo de romper el acuerdo de cooperación militar con Estados Unidos, una decisión que se produce en un contexto de crecientes tensiones. Níger ha expresado su descontento con la posición de Estados Unidos frente al actual gobierno militar del país.
El fracaso de las negociaciones para renovar este acuerdo se produjo después de que estallaran manifestaciones masivas en Niamey, donde miles de personas protestaron contra la presencia militar estadounidense. Esta hostilidad pública se produjo poco después de la llegada de los militares rusos a Níger, una señal del giro hacia Moscú.
Mientras tanto, el futuro de la base aérea estadounidense de 110 millones de dólares en el desierto de Níger sigue siendo incierto. El Sahel tiene una importancia estratégica para Estados Unidos.
Ultimátum para una sociedad canadiense del uranio
El proyecto Madaouela también siembra la discordia en el país africano. En 2015 el gobierno nigerino concedió a la empresa canadiense GoviEx una autorización para desarrollar el proyecto de extracción y procesamiento de uranio de la mina Madaouela. Sin embargo, el proyecto se retrasó y los canadienses esperan que la producción comience el año que viene.
La empresa canadiense ha explicado que también se han iniciado conversaciones con empresas asociadas, con el objetivo de acelerar el ritmo para iniciar la producción en la mina lo antes posible.
Pero el gobierno actual no lo ve así. El artículo 39 del Código Minero de Níger estipula que, tras la concesión de un permiso de funcionamiento, las empresas interesadas están obligadas a comenzar a trabajar en un plazo de dos años. Sin embargo, en el caso Madaouela la espera es mucho más larga.
El gobierno nigerino aprieta las clavijas a la minera canadiense. Ha informado a GoviEx que si la producción de uranio no comienza antes del 3 de julio de este año, el permiso otorgado caducará y la minera canadiense no podrá llevar a cabo su programa.
Los canadienses han confirmado que han iniciado conversaciones con los gobernantes para solucionar las diferencias.
El mercado del uranio está en su punto más alto y en Níger es el recurso más importante. El uranio es el primer recurso natural, el que más pesa en el sector minero nigerino (que representa el 7,6 por cien del PIB nacional).
El gobierno saheliano quiere aprovechar los altos precios de la materia prima lo más rápidamente posible.
Las minas son el nuevo maná africano
Los recursos minerales -y sobre todo el uranio- son un pilar importante del desarrollo de Níger y otros países africanos. África, que es el continente minero por excelencia, está repleta de importantes yacimientos de uranio. Los precios están por las nubes y los países del Continente Negro tienen que aprovechar la oportunidad.
La demanda es fuerte porque desempeña un papel muy importante en la producción de energía en una situación de crisis internacional de suministros a causa de las sanciones a Rusia.
África dará la bienvenida muy pronto a otro productor de uranio en el Sahel: Mauritania. La mina de Tiris ofrecerá inmensas oportunidades a Mauritania. El proyecto está encabezado por la minera australiana Aura Energy. El 18 de marzo la empresa anunció una recaudación de fondos de 16,2 millones de dólares australianos que permitirán activar la producción de la mina.
Si el plan de inversiones se implementa sin imprevistos, la mina entrará en producción en 2026. Aura Energy activará otra recaudación de fondos a corto plazo con el objetivo de explotar todo el potencial de la mina. Las cifras anunciadas son estratosféricas. Los ingresos se calculan en 2.250 millones de dólares en 16 años.
El país magrebí tiene uno de los potenciales mineros más prometedores de África. El gobierno está decidido a hacer del sector minero la piedra angular del desarrollo económico nacional. Después de erradicar a los yihadistas, Mauritania puso en marcha varias series de proyectos socioeconómicos. El país tiene muchas vetas esperando a ser explotadas. Esto significa que en los próximos años podrá convertirse en una superpotencia en el Continente.