«El Comando Estratégico Aéreo (SAC, por sus siglas en inglés) tenía por objetivos prioritarios exponer a la población civil a altos y mortíferos niveles de lluvia radioactiva», según relata la institución encargada de analizar estos documentos.
No se excluía de esta exposición radioactiva ni siquiera a las «fuerzas aliadas» de Estados Unidos en la parte occidental de Alemania.
Los autores del plan consideraban la «destrucción sistemática» no solo de objetivos urbano-industriales del bloque soviético sino también de «los habitantes de Moscú, Pekín, Varsovia y Berlín Este».
El documento secreto, fechado en 1959, consta de 800 páginas que constituyen una de las fuentes de estudio más interesantes para estudiar el periodo de la guerra fría en cuanto a los planes de guerra nuclear del bloque estadounidense.