Turkmenistán no autoriza la entrada a los representantes de la OMS y declara que en el país no hay coronavirus. Lo que parece preocuparles es que la entrada de la OMS pueda iniciar el brote de una epidemia.
El gobierno ha frenado la histeria, eludiendo el distanciamiento social, el uso de mascarillas y guantes, o incluso los debates en los medios de comunicación sobre el virus.
La delegación de la OMS, que debía visitar Turkmenistán hace un mes, nunca ha podido entrar. La visita aún está en fase de proyecto.
Pero parece ser un juego de espera por parte de Turkmenistán, que ha decidido no participar en la actuación en vivo del Evento 201. Por esta razón, no informará de las infecciones de coronavirus.
“Estamos en contacto permanente con los ministerios de este país, con los funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores y el Ministerio de Salud. Dentro de unas semanas, nuestro grupo visitará Turkmenistán, todo está ya organizado”, dijo Hans Kluge, Director de la Oficina Regional de la OMS para Europa.
Turkmenistán sigue siendo uno de los pocos países del mundo en que todavía no se han detectado oficialmente casos de coronavirus. Según los informes de los medios de comunicación, se están produciendo grandes acontecimientos en el país, no se permite a los periodistas mencionar el virus y las personas que llevan máscaras y guantes son multadas.
Pero todo esto no impide que el gobierno acepte ayuda humanitaria contra una pandemia que no existe. Estados Unidos ya han proporcionado al país 1,4 millones de dólares.
El gobierno ha utilizado esta suma simbólica para difundir información sobre salud pública en la televisión, lo que probablemente hace por la obligación de utilizar el dinero de esta manera. Los mensajes de información pública instan a las mujeres embarazadas a seguir su dieta prenatal y se alienta a las personas a tomar vitaminas C y D, sin referencia al coronavirus.
Durante mucho tiempo la vecina Tayikistán también negó la presencia de personas infectadas de coronavirus. Después de que permitieran a la OMS entrar en el país, les pusieron a la cabeza de la región en cuanto al número de muertes debidas a la pandemia, lo que les ha permitido obtener importantes ayuda y fondos.
La autorización se llevó a cabo en medio de una importante controversia política.