En los tuits ironizaba con la vuelta de los GRAPO y ETA, o sobre la muerte del almirante fascista Luis Carrero Blanco.
El caso de Strawberry llegó al Tribunal Supremo después de que fuese absuelto por la Audiencia Nacional el pasado mes de julio. El tribunal entendió que el cantante usa tono provocador, irónico y sarcástico en las letras de sus canciones, “con un tono crítico con la realidad social y política, tratando que el público comprenda el sentido metafórico y ficticio que envuelven sus obras, respecto al concepto de fondo siempre de carácter pacífico y exclusivamente cultural”.
“He utilizado el humor, el sarcasmo, la ironía para tratar de desconcertar y hacer pensar más allá de los dogmas políticos y religiosos que se nos inculcan desde pequeño […] contra el centro comercial cultural que nos quiere inculcar el sistema”, dijo el cantante sobre sus comentarios en Twitter.
La defensa del cantante confía en que César no entre en prisión y ha anunciado su intención de acudir al Tribunal Constitucional, lo cual no servirá para nada (a no ser que seas un nazi que apoya las matanzas del III Reich en los campos de concentración).
Las muestras de apoyo hacia el cantante y en repudio hacia la decisión del Tribunal Supremo no se han hecho esperar.