Ambos se conocieron a finales de los años setenta, cuando Bill Clinton era gobernador de Arkansas y Nichols trabajaba en el Arkansas Development Finance Authority, un organismo público.
Ante las cámaras de televisión Nichols relató las numerosas violaciones cometidas por Bill Clinton a lo largo de los años y los esfuerzos de su mujer para encubrirlas. Además de matar para ellos, la pareja le encargó golpear a los maridos y las mujeres para impedir que denunciaran los hechos.
Cuando el presentador le pregunta los motivos por los cuales cometió esos crímenes, Nichols habla del dinero que le pagaron por su trabajo de sicario. “Antes maté por el gobierno y luego por los Clinton, ¿qué diferencia hay?”, respondió el mercenario.
“Cuando recibía una llamada F2 significaba que debía matar. Cuando la orden llegaba de Reagan, lo hacía por dios y por el país. Cuando llegaba de los Clinton no me quedaba más remedio que joderme. Tenía que matar a alguien y cortarle los cojones”.
El pistolero también ha participado en los documentales “The Clinton Chronicles” (*), en los que relata el blanqueo de dinero, extorsión, corrupción, chantaje, violaciones y asesinatos cometidos por los Clinton y por él mismo.
Según Nichols, es Hillary quien lleva las riendas de la pareja y quien durante más de 30 años forjó la carrera política de su marido desde Arkansas hasta la Casa Blanca.