Galant, ministro israelí de Vivienda |
“A aquellos que quieren matar a los israelíes no se les debería permitir quedarse aquí, échenlos a Siria para que vivan allí”, dijo Galant, exigiendo restricciones y penas más duras para los familiares de los palestinos que realizan ataques de represalia.
Las declaraciones del ministro israelí tuvieron lugar tras un incidente armado en las cercanías de Al-Quds (Jerusalén), cuando un palestino abrió fuego contra los miliares israelíes desplegados en el asentamiento Har Adar, sito al noroeste de la ciudad, y provocó la muerte de tres soldados antes de ser abatido.
Galant responsabilizó a la Autoridad Nacional Palestina del ataque de represalia y le advirtió de que hará todo lo que esté en su poder para castigar a las autoridades palestinas por el ataque.
Más de medio millón de israelíes viven en más de 120 asentamientos ilegales construidos desde la ocupación de los territorios palestinos de Cisjordania y Al-Quds en la Guerra de los Seis Días, en 1967.
Las colonias israelíes en los territorios palestinos ocupados son consideradas ilegales por la ONU y la Unión Europea ya que la Convención de Ginebra prohíbe construir en tierras ocupadas.
Desde comienzos de este año el gobierno israelí acelera los planes para la construcción de 11.700 viviendas de colonos, dijo el domingo Walid Assaf, presidente de la Comisión contra el Muro y los Asentamientos.
Según Assaf, el gobierno israelí aprobó planes para el establecimiento y expansión de 122 asentamientos en los últimos seis años a expensas de las tierras palestinas.
Assaf advirtió además de otras ofertas de asentamiento en la Jerusalén ocupada y Al-Jalil. “El gobierno israelí ha avanzado un peligroso plan para aislar la Ciudad Vieja de Al-Jalil de su medio ambiente, otorgando a los colonos un consejo municipal”, dijo.