Ese tipo de peticiones aumenta a un ritmo galopante. Según QZ (*) en Estados Unidos han crecido un 26 por ciento en relación al año pasado. A escala mundial las peticiones han aumentado un 21 por ciento.
Desde 2013, fecha en la que oficialmente el monopolio informático comenzó a entregar datos de sus usuarios a los gobiernos, el número de peticiones procedentes de Estados Unidos se ha triplicado.
Joe Joseph, del Daily Sheeple, asegura que Facebook se creó precisamente para eso: para que los Estados se mantengan al corriente de la vida privada de sus súbditos.
El capataz de Facebook, Mark Zuckerberg, no empezó de la nada, como suelen hacer creer las historietas fantásticas.
El dinero para crear la red social salió de los fondos de la CIA, a través de sus típicas sociedades fantasmales, una inversión rentable que -a la larga- ha convertido al espionaje en una actividad muy barata.
En los seis primeros meses de 2013 Facebook entregó el 79 por ciento de los datos que le solicitó el gobierno de Estados Unidos, algunos de los cuales pasaron a formar parte de litigios judiciales, confiesan los monopolistas.
Cuatro años después, Facebook admite el 85 por ciento de las peticiones que le cursan los gobiernos, o sea, casi todas.
Es un error creer que toda esa información tiene algún destino concreto. No. Se acumula porque ese es exactamente su destino: ser almacenada y luego procesada.
Para ello Estados Unidos tiene unas dependencias en Bluffdale, Utah, capaces de almacenar y procesar todas las comunicaciones que se produzcan en los próximos diez años en todos los países del mundo.
(*) https://qz.com/1160719/facebooks-transparency-report-the-company-is-giving-the-us-government-more-and-more-data/