Desde los primeros días de la era nuclear, el presidente estadounidense siempre ha tenido el poder exclusivo de desencadenar un ataque nuclear, ya sea preventivo o en respuesta a un ataque previo.
Es una situación heredada de la decisión tomada en 1945 bajo la presidencia de Harry Truman de bombardear de Hiroshima y Nagasaki. Ayer al New York Times se le ocurrió poner en duda esta prerrogativa y preguntar a los 530 parlamentarios por ella (*).
La mayoría de los republicanos no quiso responder y los demócratas desafían la competencia del Presidente en una guerra nuclear, más que nada por una situación coyuntural: Trump llega a la Casa Blanca.
El senador Edward Markey dijo que “la historia está llena de errores de juicio y de falsas alarmas, realmente es hora de reevaluar nuestra política nuclear”.
La senadora Elizabeth Warren dijo que “iniciar un ataque nuclear preventivo es un acto de guerra que debería ser autorizado de antemano por el Congreso”. Por su parte, el senador Chris Van Hollen afirmó que era “imperativo limitar el poder del presidente para evitar el estallido accidental o impulsivo de un conflicto nuclear”.
Los republicanos son más reacios a limitar la facultades nucleares del Presidente. Jefferson Van Drew reconoció que “los ataques preventivos eventualmente tendrían que ser aprobados”, aunque el presidente debe conservar su competencia para tomar represalias inmediatamente si se le amenaza: “Es esencial que el presidente pueda responder rápidamente a un ataque para proteger al país”.
El senador Pete Ricketts afirmó que “los estadounidenses han dado un mandato claro a Donald Trump para garantizar su seguridad”.
Varios miembros del Congreso han pedido “salvaguardias legislativas”, como la formación de un comité responsable de aprobar cualquier ataque preventivo. El representante demócrata Ted Lieu también recordó que el Congreso “constitucionalmente tiene el poder de declarar la guerra, y un primer recurso a las armas nucleares no debe basarse en la decisión de un solo hombre”.
El debate, pues, no está resuelto.
(*) https://www.nytimes.com/2024/12/17/opinion/congress-nuclear-power-sole-authority.html