Hace ya unos años, y con el objeto de defenderse de un ataque de Irán y Corea del norte, comenzaron a instalar en los países bálticos, en Polonia y en Rumania, todo tipo de misiles de largo alcance que en realidad apuntaban a Rusia. Era lógico suponer que si el peligro era Irán, esos misiles deberían apuntar a sus hipotéticos blancos desde por ejemplo Arabia saudí.
Si el riesgo era Corea del Norte, los misiles contra Corea deberían instalarse en Japón, que son muy cercanos para defenderse de acciones bélicas de esos estados. La falacia estaba desvirtuada por los absurdos pretextos del imperio USA.
El mayor de los disparates, llegó por parte del secretario general de la OTAN, que acusó a Rusia de acercarse cada vez más a las fronteras de la OTAN. Rusia es un país soberano y dentro de su territorio puede instalar artilugios de guerra, cuando ve que muy cerca de su territorio se despliegan armas ofensivas de extraordinario poder destructor.
Otra vez el imperio intenta engañarnos, creando una falsa alarma, acusando a Corea del norte de ser el gran peligro que acecha la humanidad. Pero esta vez lo han hecho mejor. Han mandado a las costas coreanas al portaaviones Carl Vinson de propulsión nuclear que lleva en sus bodegas a más de ochenta aviones de combate, junto a una flota de destructores de bandera USA, y otros navíos militares de bandera japonesa y surcoreana, para «disuadir» a Corea del norte y evitar de esa manera el peligro que significa la Corea socialista.
Durante años las calumnias contra la República Popular y Democrática de Corea se orientaron a «demostrar» que ese país estaba pasando una hambruna terrible, que la gente moría de hambre y enfermedades en las calles, y que el nivel de vida era asimilable al de un país africano.
Cabe entonces la pregunta obvia de como un país que pasa por tales estrecheces, cuyo territorio es cultivable solo en el 20 por ciento, es un peligro para una de las mayores potencias militares de la tierra. Es evidente que todo esto es una pura falacia de las tantas que utiliza el imperio USA.
El objetivo no es Corea del norte; ni Corea del norte significa ningún peligro para los USA. El objetivo son China y Rusia, y esa falacia del peligro coreano le permiten a los USA instalar en Corea del sur, un sistema de misiles para rodearlos con bases militares, porque lo que en realidad peligra para los USA, es su intención de controlar el Pacífico, y así dificultar a sus competidores, que son el grupo de Shangai,y el Banco Euroasiático de Desarrollo. Una vez más el imperio USA, ese gran trilero del mundo nos quiere dar gato por liebre.