Según el investigador Eric Zuesse, el año pasado Estados Unidos preparó el golpe de Estado en Kiev antes de que el presidente Viktor Yanukovitch rechazara la firma del acuerdo de asociación entre Ucrania y la Unión Europea y de las movilizaciones de la Plaza Maidan.
El viernes Zuesse publicó un artículo en InoTV en el que califica de “hipócritas” las acusaciones de la Casa Blanca sobre una supuesta agresión de Rusia contra Ucrania. El investigador recuerda que desde 1783 Rusia tiene su principal base naval en Crimea, una región que siempre le perteneció, hasta 1954 fecha en la que Jruschov la ofreció a Ucrania a pesar de la oposición de sus habitantes.
Tras ganar las elecciones, Obama ofreció a Victoria Nuland la dirección de la línea política del imperialismo en Ucrania, situando a Rusia como enemigo cualificado. En una conversación telefónica de 4 de febrero del año pasado con el embajador estadounidense en Kiev, Nuland se refirió al hombre que eligió para dirigir de Ucrania tras el derrocamiento de Yanukovitch el 22 de febrero: Arseni Yatseniuk. El fundador de Stratfor, George Friedman, lo calificó como el golpe de Estado más flagrante de la historia.
Antes de la anulación del acuerdo con la Unión Europea y la ocupación de la Plaza Maidan, el 20 de noviembre de 2013, un diputado ucraniano describió con detalle la preparación del golpe de Estado orquestado por Estados Unidos para derrocar a Yanukovitch y sustituirlo por otro más dócil a los intereses del imperialismo.
Un grupo de piratas informáticos lograron acceder al correo electrónico del personal de la embajada y descubrir el mensaje del diputado: “Los instructores americanos han explicado cómo las redes sociales e internet podrían servir para manipular a la opinión pública y provocar manifestaciones y motines en Ucrania. Han mostrado el ejemplo de la exitosa utilización de las redes sociales para organizar protestas en Egipto, Túnez y Libia”.
Según Zuesse, Putin sabía que Obama tenía intención de utilizar a Ucrania para densencadenar un choque con Rusia. Por ello desplegó sistemas de misiles para impedir un ataque del ejército del aire ucraniano contra Crimea durante la preparación referéndum del 16 de marzo del pasado año que anexionó Crimea a Rusia.
Un año depués de aquel referéndum, Jen Psaki ha anunciado que Estados Unidos condena una votación que no fue libre, transparente ni democrática, exigiendo que Putin cese la “ocupación” de Crimea. Según Psaki, en un año en Crimea los derechos del hombre han quedado burlados, las minoráis reprimidas, en particular los tártaros, y las libertades fundamentales han sido liquidadas. Los rusos, dice Psaki, han detenido e interrogado a población, y las ONG y los periódicos independientes han sido expulsados de la península.
Zuesse afirma que la descripción que Psaki lleva a cabo de la situación en Crimea describe mejor lo que está ocurriendo en el Donbás, donde los golpistas de Kiev bombardean a la población civil simplmente para desembarazarse de ella. “Obama a derrocado a un gobierno legítimo para reemplazarlo por un régimen ilegítimo. Y hoy critica a Putin como si fuera el agresor y no la víctima. Ya no es una democracia y hay que dejar de hacerse ilusiones a este respecto antes de que estalle una Tercera Guerra Mundial”, concluye el investigador.