Una patrulla naval de la Guardia Revolucionaria, que forma parte del ejército iraní, interceptó el barco que transportaba 250.000 litros de fueloil.
“El barco navegaba desde Bandar Lengeh hasta las aguas de Emiratos Árabes Unidos antes de ser capturado a 20 millas [32 kilómetros] al este de la isla de las Grandes Cataratas”, dijo el general de brigada Ali Ozmayi.
“Los once tripulantes del barco fueron detenidos”, añadió, sin decir cuándo ocurrió, ni indicar la nacionalidad del buque.
Es la segunda convulsión de este tipo desde principios de mes. El 7 de septiembre un barco sospechoso de contrabando de combustible fue incautado en el Estrecho de Ormuz y 12 miembros de su tripulación, filipinos, fueron detenidos.
Este incidente ocurrió cuando las tensiones entre Irán y Estados Unidos volvieron a aumentar.
Los rebeldes huthíes, apoyados por Irán y enfrentados a una coalición militar encabezada por Riad desde 2015, han reclamado un ataque a dos instalaciones petroleras del gigante saudí Aramco, que ha reducido la producción saudí de petróleo considerablemente.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, acusó a Irán de ser el autor del ataque, lo que Teherán ha rechazado.
Ayer Trump dijo que Estados Unidos estaba listo para tomar represalias después del ataque, lo que suscitó temores de una escalada militar entre ambos países.