El ejército estadounidense se prepara para librar la guerra de la información y la intoxicación. El Mando de Operaciones Especiales (Socom), responsable de las actividades militares encubiertas más importantes, se encarga de las campañas de propaganda y engaño en internet utilizando vídeos falsos, para lo cual el Pentágono ha firmado varios contratos con empresas privadas especializadas.
Los planes describen el pirateo de dispositivos conectados a internet para escucharlos y calibrar la sensibilidad de las poblaciones extranjeras a la propaganda.
En un nuevo documento del Socom, publicado por primera vez en 2020 por la Dirección de Ciencia y Tecnología, el gobierno estadounidense confesó abiertamente que lleva a cabo campañas de propaganda y engaño especialmente destinadas a circular por internet.
Las aspiraciones del Socom en materia de propaganda de nueva generación se esbozan en el documento, que solicita propuestas a empresas externas que puedan desarrollar las nuevas técnicas de engaño y trucaje. El documento establece una lista de algoritmos de nueva generación para el mando de las fuerzas especiales.
Luego ha publicado una versión actualizada de su lista de compras (*), con una nueva sección: “Tecnologías avanzadas para operaciones de apoyo a la información militar (MISO)”, un eufemismo del Pentágono para referirse a sus planes mundiales de propaganda y engaño.
El párrafo añadido afirma que el Socom pretende llevar a cabo “operaciones de influencia, manipulación digital, interrupción de las comunicaciones y campañas de desinformación a nivel táctico y operativo”. Quiere recopilar datos a través de los flujos de información públicos y abiertos, como las redes sociales, los medios de comunicación locales, etc., que permitan al MISO dirigir operaciones de influencia.
Por lo general, el Socom lucha en la sombra, pero su reputación pública y su huella mundial son significativas. Compuesto por unidades de élite del Ejército de Tierra, el Cuerpo de Marines, la Armada y las Fuerzas Aéreas, el Socom dirige las operaciones militares más comprometidas de Estados Unidos.
Aunque las fuerzas especiales estadounidenses son conocidas por operaciones como el asesinato de Bin Laden a manos de los Navy Seal, su historial está repleto de misiones encubiertas, subterfugios, sabotajes y campañas de desestabilización. Los planes de desinformación de nueva generación son sólo una parte de una larga y extensa historia de engaños por parte de los militares y la inteligencia estadounidenses.
El mando de operaciones especiales lleva años coordinando “operaciones de influencia” y campañas de engaño en el extranjero. El Socom convenció a Twitter para que permitiera una red de cuentas ficticias que difundieran noticias falsas, incluida la afirmación de que el gobierno iraní estaba robando los órganos de civiles afganos. Aunque la ofensiva propagandística basada en Twitter no utilizó “falsedades profundas”, los contratistas del Pentágono utilizaron avatares generados mediante aprendizaje automático para dar realismo a las cuentas falsas.
Ahora el Socom quiere reforzar los engaños en internet mediante el uso de vídeos falsos de última generación, más realistas, utilizando el aprendizaje automático. Las fuerzas especiales utilizan las imágenes falsas para “generar mensajes e influir en las operaciones a través de canales no tradicionales”, asegura el documento oficial.
El uso de “falsedades profundas” para engañar deliberadamente podría tener un efecto desestabilizador en las poblaciones civiles expuestas a ellas. El documento afirma que la capacidad de espiar objetivos de propaganda “permitiría a MISO desarrollar y promover mensajes que probablemente sean más fácilmente recibidos por las poblaciones locales”. En 2017 WikiLeaks publicó archivos robados de la CIA que revelaban una capacidad aproximadamente similar para piratear electrodomésticos.
La tecnología que elabora los videos falsos surgió por primera vez aquel año, impulsada por una combinación de equipo informático potente y avances en el aprendizaje automático. Una vez que la aplicación ha sido suficientemente entrenada, puede producir imágenes realistas de un objetivo diciendo o haciendo casi cualquier cosa. La facilidad de uso y la creciente precisión de esta tecnología hacen temer una era en la que el público mundial ya no pueda creer lo que ve con sus propios ojos.
En una audiencia del Comité de Servicios Armados del Senado en abril de 2018, el general Kenneth Tovo, del Comando de Operaciones Especiales del Ejército, aseguró a los senadores que las fuerzas especiales habían invertido bastante en sus “operadores psicológicos”. Las nuevas herramientas informáticas del Socom que “nos permiten evaluar el espacio de los medios sociales, el dominio cibernético, el análisis de tendencias, hacia dónde se está moviendo la opinión, y luego influir potencialmente en ese entorno con nuestros propios productos”.
(*) https://www.documentcloud.org/documents/23696654-us-socom-procurement-document-announcing-desire-to-utilize-deepfakes