José Guillén
Hace unos días
llegó a mis manos, después de mucha insistencia y hasta persecución
por parte de un militante del PCPE, su archiconocido periódico
“Unidad y Lucha”, periódico que en las próximas fechas
realizará una folclórica fiesta en el madrileño barrio de Vallekas
celebrando no sé muy bien el qué, será que el movimiento comunista
español ha dado un salto cualitativo y hay motivos para realizar
celebraciones con cantidades ingentes de banderitas, canciones y
demás, en vez de estar a pie de calle organizando la resistencia
popular contra el Estado español, pero este no es el tema al que
pretendo ceñirme en este texto. Una vez dispuse de un momento de
tranquilidad y sosiego, le eché un ojo a la publicación en
cuestión. No iré artículo por artículo porque me parece que tiene
poco sentido, además de que no valen tampoco mucho la pena, pero
hubo uno de los artículos que me llamó la atención nada más
verlo, por la pomposidad de su título y a posteriori por su
contenido que es lo que pretendo criticar en este artículo, el
título era: “República Socialista: ¿Opción o necesidad?”
En dicho artículo a primera vista, lo que parece entenderse es
que la intención del PCPE/CJC es criticar el etapismo del PCE y su
revisionismo explicando que el partido en cuestión no quiere llegar
al socialismo sino quedarse en una fase intermedia, “la III
República”, hasta aquí estoy de acuerdo con ellos, el PCE no es
ni un partido revolucionario, ni lucha por el socialismo, pero a
partir de aquí comienzan los problemas y se demuestra como el
PCPE/CJC no tiene una línea política para conseguir el poder
político en el estado español, su falta de memoria histórica, y
que además obvia y pasa de largo el desarrollo histórico particular
y propio del Estado capitalista español, yendo a rebufo de los
análisis generales del capitalismo y limitándose a repetir
consignas como: “Llegado el momento, esta misma burguesía
podría acceder a la república sin que ello supusiera ningún
quebranto de su sistema de dominación” o “Los
revisionistas y oportunistas llaman a convocar a la ciudadanía para
instaurar un régimen republicano a imagen y semejanza de la
república del 31”.
llegó a mis manos, después de mucha insistencia y hasta persecución
por parte de un militante del PCPE, su archiconocido periódico
“Unidad y Lucha”, periódico que en las próximas fechas
realizará una folclórica fiesta en el madrileño barrio de Vallekas
celebrando no sé muy bien el qué, será que el movimiento comunista
español ha dado un salto cualitativo y hay motivos para realizar
celebraciones con cantidades ingentes de banderitas, canciones y
demás, en vez de estar a pie de calle organizando la resistencia
popular contra el Estado español, pero este no es el tema al que
pretendo ceñirme en este texto. Una vez dispuse de un momento de
tranquilidad y sosiego, le eché un ojo a la publicación en
cuestión. No iré artículo por artículo porque me parece que tiene
poco sentido, además de que no valen tampoco mucho la pena, pero
hubo uno de los artículos que me llamó la atención nada más
verlo, por la pomposidad de su título y a posteriori por su
contenido que es lo que pretendo criticar en este artículo, el
título era: “República Socialista: ¿Opción o necesidad?”
En dicho artículo a primera vista, lo que parece entenderse es
que la intención del PCPE/CJC es criticar el etapismo del PCE y su
revisionismo explicando que el partido en cuestión no quiere llegar
al socialismo sino quedarse en una fase intermedia, “la III
República”, hasta aquí estoy de acuerdo con ellos, el PCE no es
ni un partido revolucionario, ni lucha por el socialismo, pero a
partir de aquí comienzan los problemas y se demuestra como el
PCPE/CJC no tiene una línea política para conseguir el poder
político en el estado español, su falta de memoria histórica, y
que además obvia y pasa de largo el desarrollo histórico particular
y propio del Estado capitalista español, yendo a rebufo de los
análisis generales del capitalismo y limitándose a repetir
consignas como: “Llegado el momento, esta misma burguesía
podría acceder a la república sin que ello supusiera ningún
quebranto de su sistema de dominación” o “Los
revisionistas y oportunistas llaman a convocar a la ciudadanía para
instaurar un régimen republicano a imagen y semejanza de la
república del 31”.
Para nuestros buenos
amigos del PCPE/CJC, parece ser que la monarquía no les afecta, y
que se han tragado el cuento de la transición, del rey como florero
que no pinta nada en las decisiones del Estado. Parece ser que
cargarse la monarquía en este Estado no serviría de nada, todo y
eso cuando tenemos la experiencia de dos repúblicas, la del 1873 y
la de 1931, que han sido los momentos de mayor efervescencia
revolucionaria en este Estado y donde mayor movimiento popular y
democrático ha habido, hasta que a través de golpes de Estado se ha
vuelto a los regímenes anteriores reaccionarios. Pero claro, esto a
PCPE/CJC les da absolutamente igual. Para ellos una república
española es lo mismo que una república francesa, que una italiana y
que una alemana. Una buena clase de historia no les vendría mal:
fíjense que ni el propio fascismo, en su momento de mayor
contrarrevolución en los años 40 y 50, fue capaz de tumbar la
institución monárquica, debido a la influencia que tenía dentro
del propio Estado. Curioso es también que después de tumbar a la
institución monárquica en el 31, todo el sistema caciquil se
viniera abajo y se instaurara la primera y hasta ahora única etapa
donde se respetaban y se daban derechos democráticos a las masas.
Pero claro, tirar a una institución no tumba un Estado, claro que
no, por eso la figura en la que el fascismo español se apoyó para
perpetuarse y hacer que su Estado aguantara fue en el rey, y por eso
el rey es el jefe del Ejército español. Vaya… ¿a que va a
resultar que la monarquía tiene más importancia de la que dicen? En
definitiva dejar claro, que si, en esencia la república española en
sus puntos generales sería igual que cualquier república actual,
pero en su contenido particular, ese matiz revolucionario que tienen
las repúblicas en nuestro país, y que la historia ha demostrado, no
lo tendría ninguna, porque el baluarte sobre el que se apoya el
fascismo en este país y todo sus mecanismos represivos estatales, se
centran en la figura de la monarquía y es indispensable para ello.
Todo el terrorismo de Estado o el golpe de Estado del 23-F ha pasado
por las manos de la monarquía previamente. El Ejército le debe
lealtad a esta institución y la lucha por el socialismo en este país
no puede ir separada de la lucha republicana y antifascista, tumbar a
la monarquía con todo el peso que tiene en el aparato estatal
español no es algo que sea precisamente fácil para los capitalistas
(que ya lo intentaron en su momento) porque en España la palabra
república va ligada a revolución, va ligada a democracia y va
ligada a socialismo, por eso el monopolismo español no puede
defender la república, porque sería estar defendiendo su propia
sentencia de muerte. Esto los revisionista del PCPE/CJC es algo que
no alcanzan a comprender, sencillamente porque caen un mecanicismo
simplista, no hacen uso del materialismo histórico, es decir, no se
paran un momento a analizar nuestro desarrollo histórico, sino a
repetir palabrería que bien valdría tanto para España como para
Grecia, Italia, Turquía o Kazajistán… es necesario explicar a la
gente lo que es la monarquía y lo que fue la transición, aunque
acabará pasando que las masas serán la que se lo acaben explicando
a este partido que se autoconsidera la “vanguardia”.
amigos del PCPE/CJC, parece ser que la monarquía no les afecta, y
que se han tragado el cuento de la transición, del rey como florero
que no pinta nada en las decisiones del Estado. Parece ser que
cargarse la monarquía en este Estado no serviría de nada, todo y
eso cuando tenemos la experiencia de dos repúblicas, la del 1873 y
la de 1931, que han sido los momentos de mayor efervescencia
revolucionaria en este Estado y donde mayor movimiento popular y
democrático ha habido, hasta que a través de golpes de Estado se ha
vuelto a los regímenes anteriores reaccionarios. Pero claro, esto a
PCPE/CJC les da absolutamente igual. Para ellos una república
española es lo mismo que una república francesa, que una italiana y
que una alemana. Una buena clase de historia no les vendría mal:
fíjense que ni el propio fascismo, en su momento de mayor
contrarrevolución en los años 40 y 50, fue capaz de tumbar la
institución monárquica, debido a la influencia que tenía dentro
del propio Estado. Curioso es también que después de tumbar a la
institución monárquica en el 31, todo el sistema caciquil se
viniera abajo y se instaurara la primera y hasta ahora única etapa
donde se respetaban y se daban derechos democráticos a las masas.
Pero claro, tirar a una institución no tumba un Estado, claro que
no, por eso la figura en la que el fascismo español se apoyó para
perpetuarse y hacer que su Estado aguantara fue en el rey, y por eso
el rey es el jefe del Ejército español. Vaya… ¿a que va a
resultar que la monarquía tiene más importancia de la que dicen? En
definitiva dejar claro, que si, en esencia la república española en
sus puntos generales sería igual que cualquier república actual,
pero en su contenido particular, ese matiz revolucionario que tienen
las repúblicas en nuestro país, y que la historia ha demostrado, no
lo tendría ninguna, porque el baluarte sobre el que se apoya el
fascismo en este país y todo sus mecanismos represivos estatales, se
centran en la figura de la monarquía y es indispensable para ello.
Todo el terrorismo de Estado o el golpe de Estado del 23-F ha pasado
por las manos de la monarquía previamente. El Ejército le debe
lealtad a esta institución y la lucha por el socialismo en este país
no puede ir separada de la lucha republicana y antifascista, tumbar a
la monarquía con todo el peso que tiene en el aparato estatal
español no es algo que sea precisamente fácil para los capitalistas
(que ya lo intentaron en su momento) porque en España la palabra
república va ligada a revolución, va ligada a democracia y va
ligada a socialismo, por eso el monopolismo español no puede
defender la república, porque sería estar defendiendo su propia
sentencia de muerte. Esto los revisionista del PCPE/CJC es algo que
no alcanzan a comprender, sencillamente porque caen un mecanicismo
simplista, no hacen uso del materialismo histórico, es decir, no se
paran un momento a analizar nuestro desarrollo histórico, sino a
repetir palabrería que bien valdría tanto para España como para
Grecia, Italia, Turquía o Kazajistán… es necesario explicar a la
gente lo que es la monarquía y lo que fue la transición, aunque
acabará pasando que las masas serán la que se lo acaben explicando
a este partido que se autoconsidera la “vanguardia”.
Debemos extender la
organización y resistencia contra el Estado fascista, no debemos
olvidarnos de nuestras propias experiencias históricas, sino usarlas
de fuente para el análisis, para saber valorar el desarrollo
particular que tiene el Estado español como Estado capitalista, que
si en lo general coincide con el resto de Estados (gobierno de la
burguesía, existencia de la propiedad privada de los medios de
producción, explotación del proletariado, campesinado y capas
populares, etc.), en lo particular lo hace totalmente único. Y para
poder conseguir la toma del poder, se deben analizar también esas
cuestiones particulares y no universales. Saber entender la historia
de un Estado es imprescindible para poder elaborar una línea
política contra él. Claro que no quedan fases intermedias, porque
España ya es un Estado imperialista, y que el único camino es el
socialismo, pero para ello debemos combatir al Estado y por ende a la
monarquía, no subordinarla a un segundo plano, porque es
indispensable acabar con ella para llegar a la república popular y
el socialismo.
organización y resistencia contra el Estado fascista, no debemos
olvidarnos de nuestras propias experiencias históricas, sino usarlas
de fuente para el análisis, para saber valorar el desarrollo
particular que tiene el Estado español como Estado capitalista, que
si en lo general coincide con el resto de Estados (gobierno de la
burguesía, existencia de la propiedad privada de los medios de
producción, explotación del proletariado, campesinado y capas
populares, etc.), en lo particular lo hace totalmente único. Y para
poder conseguir la toma del poder, se deben analizar también esas
cuestiones particulares y no universales. Saber entender la historia
de un Estado es imprescindible para poder elaborar una línea
política contra él. Claro que no quedan fases intermedias, porque
España ya es un Estado imperialista, y que el único camino es el
socialismo, pero para ello debemos combatir al Estado y por ende a la
monarquía, no subordinarla a un segundo plano, porque es
indispensable acabar con ella para llegar a la república popular y
el socialismo.