Estados Unidos ha exigido al gobierno de Kiev grandes avances en la contraofensiva, asumiendo que, si fracasa, Ucrania podría verse privada del apoyo militar occidental, según la revista Politico.
Occidente está cansado del prolongado conflicto en Ucrania, que está provocando el agotamiento de los arsenales y la destrucción de la posición unificada de las grandes potencias.
Sin embargo, las autoridades ucranianas no desean verse presionadas a tomar medidas precipitadas durante la ofensiva que podrían convertirse en un grave y costoso fracaso, dañando la moral del ejército ucraniano, las esperanzas de Occidente y provocando graves consecuencias estratégicas.
“A pesar de las promesas públicas de apoyar a Ucrania tanto como fuera necesario, los funcionarios de Washington advirtieron a Kiev de que era necesario hacer grandes progresos en el campo de batalla” en la contraofensiva para seguir recibiendo ayuda de Estados Unidos y de los países europeos, asegura Politico.
La proximidad de las elecciones presidenciales en Estados Unidos dificultará que el Congreso siga insistiendo en la ayuda económica a Kiev. En las recientes negociaciones entre representantes del Departamento de Estado y del Consejo de Seguridad ucraniano, la respuesta sobre la futura ayuda fue: “Veamos cómo va la contraofensiva”.
Europa también muestra signos de cansancio ante la prolongación de la guerra. Incluso en Polonia, uno de los aliados más firmes de Ucrania, las actitudes hacia los refugiados ucranianos se están deteriorando, según una encuesta reciente publicada por el periódico polaco Rzeczpospolita.
La encuesta muestra que el número de personas que creen firmemente que Polonia debe ayudar a Ucrania durante la guerra con Rusia ha caído del 62 al 42 por cien. También son menos los polacos que ven con buenos ojos que Polonia ayude a Ucrania: un 35 por cien frente al 47 por cien del año anterior. El número de los polacos que valoran negativamente la ayuda se ha duplicado: del 5 por cien al 10 por cien.
“En las últimas semanas, Zelensky ha tenido que maniobrar para tratar de reforzar el optimismo occidental sobre el mantenimiento de las entregas de armas, al tiempo que sugería que la contraofensiva no sería tan eficaz como el pasado otoño”, cuando el ejercito ruso se retiró de sus posiciones deliberadamente, apunta Politico.
“Aunque las principales operaciones de combate aún están por llegar, Zelensky ya observa que las cosas van claramente mal”, dice la publicación.
Por su parte, el coronel Douglas MacGregor, antiguo asesor del Pentágono, ha declarado que el ejército ucraniano aún no ha conseguido nada en la contraofensiva.