Con ello podrán comprender la enorme importancia que tienen y tendrán los cambios a operarse en dichas regiones, cuando se produzca la segura derrota del Estado Islámico.
Hace dos días la frontera entre Siria e Irak, ha quedado expedita para ambos países como consecuencia del colapso militar de los terroristas apoyados por Arabia saudí y por los USA. Esto implica nada más y nada menos, que Irán, una gran potencia regional puede acceder sin dificultad a las costas del Mar Mediterráneo.
Este es un hecho de inusual importancia para Irán ya que a través del Mediterráneo puede vender a Europa el petróleo y el gas, y que la construcción de un oleoducto y un gasoducto que conduzcan ambos fluidos a través de Siria ya es posible.
Además de todo ello, existe en marcha el proyecto chino de la nueva ruta de la seda que, entre otras cosas, plantea la construcción de dos líneas ferroviarias, una más al norte que llegue al Báltico y una más al sur que llegue al Mediterráneo a través de Turquía.
Y todo esto sin la “aprobación” del “capo di tutti capi”, es decir, de los USA. La influencia que a partir de todo esto tendrá en la economía mundial tanto China, como Irán como Siria e Irak, tiene proporciones sin duda bíblicas.
Pero hay un actor enormemente importante, y que no hemos mencionado todavía: Rusia.
Rusia, luego de la caída de la URSS y del campo socialista, ha salido de sus cenizas como un nuevo Ave Fénix. El crecimiento económico y militar de Rusia, que es cuidadosamente minimizado por la prensa occidental significa, en la práctica, que Rusia se está convirtiendo en la primera potencia militar del mundo.
Para que no falte de nada, se cuenta ahora con el Banco Euroasiático de Desarrollo patrocinado por China, que es el financiador de los BRICS, y que está en disposición de financiar todos estos proyectos.
A pesar de los intentos de los USA, que ya ha entrado en el definitivo ocaso, de frenar lo que se viene, la suerte está echada y no hay marcha atrás. Lo viejo está muriendo y lo nuevo está naciendo. Irán, Siria, Irak, Rusia, China y posiblemente Turquía formarán un bloque a muy corto plazo, que enterrará para siempre al imperio USA.
La elección de Donald Trump como nuevo presidente de los EEUU, implica en forma tácita la aceptación de su derrota, y sobre todo de la aceptación de que ya no son el gran poder, y que no pueden dictar la política del mundo. Deberán bajar la cabeza y aceptar los hechos nuevos que se van sucediendo. Otro mundo comienza a dibujarse. Dejemos que el dibujo se plasme totalmente.
¿pero que tipo de apologia de imperialismo sino-ruso es esta?
Buf. Pues esperemos que a Occidente le pase lo mismo que a Rusia, que renazca de sus cenizas y eche abajo el "Nuevo Imperio" ruso-chino-iraní. Porque viendo los países que forman este imperio, uno se echa a temblar: China, India, Rusia, Irán, Turquía, Paquistán, etc. Países corruptos, con leyes en algunos casos medievales, con un nivel de autoritarismo que asusta en Europa Occidental. No entiendo como alguien puede ver como algo positivo la aparción de este nuevo imperio. Lo dicho, que dure poco y occidente regrese para tumbarlo.
No es ninguna apología del imperialismo sino-ruso (aunque este blog lo ha hecho bastantes veces), es un fiel retrato de las contradicciones imperialistas y de la ley leninista del desarrollo desigual y a saltos económico y político de los Estados imperialistas.
Apuesto a que esto hará que Alemania y los países del Este de la UE se alíen con Rusia y China en vez de EEUU
Arenas tiene un artículo sobre Rusia en el que alaba a Putin. No es de extrañar que en este blog se haga buena publicidad del otro bloque imperialista, de todos modos solo hace falta leer un poco y darse cuenta de como se apoyaban desde estos círculos a la perestroika… citas hay unas cuantas.
Revisionistas en los 70 y revisionistas ahora,no cambian.