La comunista alemana Clara Zetkin |
El 8 de Marzo surge, pues, por iniciativa de las organizaciones internacionales del movimiento obrero. El objetivo de la Internacional era el de movilizar a las mujeres “de acuerdo con las organizaciones políticas y sindicales del proletariado dotadas de conciencia de clase”.
La iniciativa de Clara Zetkin tenía por objeto contrarrestar la influencia del feminismo burgués, con cuyas organizaciones no cabía realizar ninguna clase de alianzas por encima de las clases sociales.
En la capital danesa participaron mujeres militantes de la II Internacional procedentes de 17 países distintos.
La reunión se celebró en Copenhague porque en aquella época en Prusia las mujeres tenían prohibido pertenecer a organizaciones políticas. A pesar de ello, Clara Zetkin había fundado en 1907 la Internacional Socialista de Mujeres, que era una sección de la II Internacional y que celebró su I Congreso Internacional aquel mismo año, también convocado y dirigido por Clara Zetkin.
Desde 1890 Zetkin dirigía, además, el periódico “Die Gleichheit” (La Igualdad), el primer órgano de prensa feminista de la historia, que tenía 125.000 suscriptores.
No obstante, en el Congreso de 1910 no se fijó una fecha concreta para celebrar cada año el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Al año siguiente, por ejemplo, se convocó el 19 de marzo, en conmemoración de la Revolución de 1848 y la Comuna de París. Las manifestaciones empezaron entonces a llenar las calles con millones de mujeres y hombres, tanto en Europa como en Estados Unidos. Sólo en Berlín se organizaron 45 mítines.
La fecha del 8 de Marzo empieza a cuajar con la Revolución Rusa. El 23 de febrero de 1917 (8 de marzo en el calendario juliano) miles de obreras textiles de Viborg, un barrio obrero de San Petersburgo, iniciaron una huelga que desencadenó la caída del zar Nicolás II. Tras ellas los obreros iniciaron la insurrección y los soldados se sublevaron contra el ejército.
“En 1917 la lucha de las obreras se convirtió en memorable para la historia. Aquel día las mujeres rusas levantaron la antorcha de la revolución proletaria y le prendieron fuego al mundo”, escribió Alejandra Kolontai.
Las trabajadoras desataron la Revolución de Febrero en torno a las consignas del hambre, el retorno de los soldados del frente, la paz y la República.
En octubre de 1917, el primer gobierno soviético incorpora por vez primera en la historia a una mujer, Alejandra Kolontai. El 8 de marzo de 1921 Lenin firma un decreto para declarar aquella jornada como Día de la Mujer Trabajadora y fiesta oficial en el país.
“Para adiestrar a las masas en la política, hay que adiestrar a las mujeres. Porque, bajo el régimen capitalista, la mitad del género humano está doblemente oprimido. La obrera y la campesina son oprimidas por el capital; además, incluso en la más democrática de las repúblicas burguesas, son inferiores al hombre ante la ley; son verdaderas ‘esclavas domésticas’ pues les corresponde la mezquina, desagradecida, dura y aburrida labor de la cocina y el hogar”, escribió entonces Lenin.
Poco después, en el mes de mayo, se celebró en Moscú la II Conferencia de Mujeres Comunistas, presidida por Clara Zetkin y Alejandra Kolontai.