Las fotos presentadas por el representante de Moscú ante la OPAQ, Alexandr Shulguin, del lugar del supuesto ataque en disposición de las autoridades rusas contradicen varios vídeos publicados por los Cascos Blancos, que afirma que fue perpetrado por fuerzas gubernamentales, explicó a la agencia Tass.
De acuerdo con la OPAQ, en el ataque se empleó gas sarín, que contrae las pupilas. Sn embargo, en las fotos tomadas supuestamente tras el ataque se ve que las pupilas de los menores registrados están dilatadas. “Es la primera inconsistencia”, afirma Shulguín.
Otra contradicción es el cráter que se produjo por el impacto. Los yihadistas de los Cascos Blancos aseguran que el ataque fue perpetrado con una bomba o un misil, pero las características del agujero hacen pensar que se formó tras estallar sobre la tierra “un pequeño dispositivo explosivo que contenía algunos elementos químicos”, ha explicado Shulguin.
El delegado ruso ha presentado el informe para exigir una investigación urgente del ataque. Las fotos que ha presentado, tomadas en el lugar del supuesto ataque químico, y los vídeos grabados por los Cascos Blancos muestran realidades muy distintas.
Las imágenes difundidas al mundo entero a través de los Cascos Blancos del ataque con gases tóxicos de Jan Sheijun muestran a decenas de civiles, niños muchos de ellos. Se habla de 30 niños de los aproximadamente 90 muertos que hubo en total.
Nadie ha explicado aún por qué había tantos niños muertos en el lugar del ataque. Las fotos no muestran a ninguna mujer muerta o herida por las explosiones. ¿Por qué había a esa hora de la madrugada tantos niños reunidos (incluidos bebés) cerca de un almacén de armas situado a las afueras de la ciudad?
¿Cómo es posible que en una ciudad controlada por los terroristas de Al Qaeda todos los muertos por el gas sean civiles?
¿Por qué algunas de las 250 personas que fueron secuestradas por terroristas de Al Qaeda una semana antes en Majdal y Jattab, aparecen ahora entre las víctimas del ataque químico de Jan Sheijun?