La prensa turca sigue apuntando al general John F.Campbell como máximo dirigente del golpe de Estado del 15 de julio. Antes de su retirada del servicio activo, entre 2014 y mayo de este año, Campbell fue comandante de las tropas americanas que ocuparon Afganistán, dentro de la Operación Apoyo Resuelto.
El sitio Balkan Insight desvela hoy un informe sobre la visita a Turquía del jefe de Estado Mayor del ejército estadounidense, Joseph Dunford, en medio de un deterioro creciente de las relaciones entre ambos países de la OTAN.
El portal asegura que las investigaciones en curso sobre el golpe han destapado dos visitas clandestinas del general Campbell a Turquía después de pasar a la reserva en el ejército de Estados Unidos, es decir, desde el mes de mayo de este año. Con el general colaboró para preparar el golpe un equipo de 80 especialistas de la CIA.
La intervención del general Campbell en el golpe de Estado ya fue anunciada antes por el diario Yeni Şafak. Para financiar la trama, Campbell realizó varias transacciones bancarias por un monto de 2.000 millones de dólares a través del banco UBA (United Bank of Africa) de Nigeria, que fueron distribuidos entre los golpistas de la red Gülen y otros oficiales locales de alta graduación.
En el registro practicado en la habitación de uno de los golpistas, el general de brigada Mehmet Disli, se ha encontrado un maletín con una parte importante del dinero entregado por el general estadounidense.
Las transacciones bancarias ponen de manifiesto que el operativo golpista se inició en marzo del pasado año, creando listados con tres grupos de militares: los partidarios, los neutrales y los opositores al golpe.
En 1960 Estados Unidos organizó uno de sus primeros golpes de Estado en Turquía, destituyendo al primer ministro Adnan Menderes después de que viajara a Moscú para pedir ayuda económica de la URSS, entonces dirigida por Jruschov.
20 años después, en 1980, Estados Unidos instigó otro de sus golpes tras la visita a Washington del jefe de Estado Mayor del ejército turco, quedando al descubierto cuando fueron los primeros en anunciar la asonada.
No es la primera vez que Campbel se ve implicado en operaciones turbias. Durante su mandato al frente de las tropas que ocuparon Afganistán ordenó varios crímenes de guerra, como el brutal ataque al hospital de Kuduz, durante el cual fallecueron decenas de heridos y personal médico.
Durante sus dos visitas clandestinas a Turquía, el general estadounidense organizó varias reuniones confidenciales en las bases aéreas de la OTAN de Incirlik y Erzurum, es decir, que utilizó dichas instalaciones para conspirar contra un país miembro de la propia alianza militar.
Algunas fuentes sospechan que, a modo de aviso, Turquía podría retirar sus tropas de Afganistán, donde actualmente hay 523 soldados turcos, la mayor parte de ellos en la base central de Kabul.
En cualquier caso, la OTAN está ante la mayor crisis de su historia, sólo comparable a 1964-1966, cuando De Gaulle abandonó el Tratado y la alianza tuvo que trasladar su sede de París a Bruselas.