Al menos 11 personas han sido detenidas en los fuertes disturbios y enfrentamientos con la policía durante una protesta que ha congregado a cerca de 5.000 personas en las calles de Múnich para protestar contra las medidas restrictivas impuestas en el país.
Así lo ha indicado la policía de Múnich, que ha tenido que usar gas pimienta y porras para dispersar a los manifestantes, que habrían cometido al menos catorce delitos.
Asimismo, se habrían producido varias agresiones a miembros de la policía, aunque de momento no se ha detallado quiénes son los responsables ni de qué manera ocurrieron.
Los manifestantes, que ya habían cancelado una manifestación, se habían puesto en contacto por mensajería instantánea para dar “un paseo espontáneo” por la ciudad, lo que ha derivado, a última hora de la noche, en una gran protesta en el centro de la capital de Baviera.
La policía de la ciudad ha informado que los manifestantes, en un primer momento, han ignorado los llamamientos a dispersarse, aunque finalmente lo han hecho alrededor de las 21.30 horas (hora local), con pequeños grupos que todavía permanecían en la ciudad.
Por otro lado, otra manifestación con cerca de 160 personas, que se oponían a la concentración registrada originalmente, ha transcurrido con normalidad.