El dirigente marfileño Charles Blé Goudé |
El testigo puso varios nombres encima de la mesa, entre ellos el de Issiaka Diaby, presidente del “Colectivo de Víctimas”, quien les dijo que si declaraba ante el Tribunal encontraría un manera de “ponernos de acuerdo” entre ambos para “ayudarnos un poco”.
Luego el testigo relató las circunstancias en las que fue detenido tras la manifestación frente a la RTI el 16 de diciembre de 2010. Broulaye dijo que salió de su pueblo con dos amigos para ir a la manifestación “a ver lo que pasaba”. Pero al llegar a la estación vieron a mucha gente uniformada y se asustaron. Se marcharon en taxi a otro lugar.
Entonces los abogados defensores empezaron a poner de manifiesto las incoherencias del testigo, que esquivó sus preguntas diciendo que conductor del taxi cambió varias veces de dirección a causa de las barricadas que impedían el recorrido.
En una de ellas, unos policías encapuchados detuvieron el taxi definitivamente y sus amigos pudieron huir, mientras que a él le detuvieron en la siguiente barricada. Entonces la policía la ató y le golpeó, quitándole su cédula de indentidad. Le pasearon por varias comisarías y luego al juez, que le puso en libertad el 31 de diciembre.
Pero entonces los abogados mostraron al tribunal la ficha policial de Sanogo Broulaye, que no se correspondía con los datos del testigo. Éste replicó diciendo que durante su detención dio un nombre falso a la policía a causa de los golpes que recibió.
Había caído en la trampa: ¿cómo es posible que lograra engañar a la policía si antes había dicho que en el momento de la detención le quitaron sus papeles de identidad? Entonces el abogado de la defensa dijo que se duisponía demostrar que el testigo nunca había estado detenido en la comisaría por la que dijo que había pasado. En ese momento el magistrado le retiró la palabra.