Las autoridades turcas han desplegado un importante dispositivo policial antidisturbios en torno a la base militar de Estados Unidos y la OTAN de Incirlik, en la región turca de Adana, donde cerca de mil personas se han manifiestado en contra de la presencia de fuerzas militares imperialistas.
Los manifestantes corearon consignas antiestadounidenses y antiisraelitas. Por su parte, la policía turca puede haber bloqueado todas las carreteras que dirigen hacia las instalaciones militares.
La base aérea de Incirlik saltó recientemente a los titulares de la prensa internacional tras el intento de golpe de Estado militar del pasado 15 de julio después de que las autoridades turcas encontrasen indicios de que parte de los cómplices de la intentona golpista procedían de estas instalaciones.
El primer ministro turco, Binali Yildrim, constató el aumento de antiamericanismo en su país tras la pugna con Washington por la extradición del clérigo turco Fetulah Gülen, quien para Ankara es el inspirador principal de la sublevación militar.
El pasado 17 de julio, el máximo responsable de la OTAN en esta base aérea, el general Bekir Ercan Van fue detenido en la ciudad de Adana bajo la sospecha de estar vinculado en el fallido golpe de Estado. Se cree que ha solicitado asilo a Estados Unidos aunque Washington rechazó su solicitud. Esta instalación aérea tiene una gran importancia estratégica debido a que aloja tropas y armamento de Estados Unidos para luchar contra el Califato Islámico.