Según el diplomático filipino, la formación del personal militar se realiza en el marco de la cooperación técnica y militar entre Moscú y Manila. “Es parte de nuestro acuerdo de cooperación en materia de defensa, la creación de grupos de trabajo que discutirán los detalles y parte de su agenda es el adiestramiento”, dijo.
El acuerdo prevé varios cursos cortos. Los programas a largo plazo incluyen la capacitación de oficiales de la marina y se anunciaron tras una reunión entre el Comandante de la Armada rusa, el almirante Vladimir Korolev, y su homólogo filipino, Robert Empedrad, en las celebraciones del Día de la Armada rusa en San Petersburgo.
“¿Cuándo empezará? Espero que pronto, porque tienen que aprender ruso primero”, dijo el embajador, quien añadió que Moscú y Manila podrían crear grupos de trabajo para redactar un memorando de entendimiento en sectores específicos, como la aviación, la marina, las tropas de tierra, etc.
Los ministros de Defensa Serguei Shoigu, de Rusia, y Delfin Lorenzana, de Filipinas, firmaron un acuerdo de cooperación técnica militar el 24 de octubre de 2017. En virtud del acuerdo, Rusia suministró a Filipinas una remesa de lanzagranadas.
Durante su encuentro con el Presidente filipino Rodrigo Duterte al margen de una cumbre de APEC en Da Nang en noviembre de 2017, el Presidente ruso Vladimir Putin subrayó la disposición de Rusia a desarrollar relaciones con Filipinas, “incluyendo la defensa y la cooperación técnica militar”.
En otra entrevista con Tass a principios de este año, el embajador ruso en Filipinas, Igor Khovayev, anunció que el contrato para los lanzagranadas podría ser seguido por otros.