Londres ha adoptado una línea agresiva contra Moscú en los últimos meses, acusándolo de un aumento en la actividad submarina cerca de las aguas británicas, envenenando a un agente doble ruso y, lo que es más importante, realizando ataques regulares de pirateo informático contra la infraestructura británica.
The Sunday Times primero dio la noticia de los simulacros secretos, citando a funcionarios anónimos familiarizados con el asunto. “Si hundieron a nuestro portaaviones con un torpedo de cabeza nuclear, ¿cuál es nuestra respuesta? No hay nada entre hundir su submarino y lanzar un arma nuclear en el norte de Kamchatka”, dijo un funcionario.
“Es por eso que el ciberespacio es tan importante. Puedes ir a la ofensiva y apagar las luces en Moscú para decirles que no están haciendo lo correcto”, agregó el funcionario.
La semana pasada los funcionarios británicos acusaron a Moscú de tomar el control de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas. Londres asegura que los intentos de piratear a la referida Organización demuestran que Rusia estuvo detrás del ataque de marzo en Salisbury, durante el cual el espía Serguei Skripal y su hija fueron atacados con el agente nervioso “novichok”.
Los funcionarios británicos también acusaron que el ataque pirata tenía como objetivo descarrilar un análisis pendiente de los ataques con armas químicas en Siria.
Estados Unidos y más recientemente Holanda también han acusado al Kremlin de orquestar ataques cibernéticos similares. Según el informe, los planificadores militares británicos estaban elaborando planes para usar “fuerzas irregulares” con el fin de contrarrestar los posibles movimientos rusos contra la OTAN en la región del Báltico y otras partes del mundo.