El día 18 de este mes la cadena de televisión Afrique Media denunciaba (1) que el ejército camerunés había abierto un contenedor precintado de la ONU descubriendo que contenía armamento y material militar destinado al movimiento salafista Boko Haram (2).
Que se sepa, es la primera vez que las sospechas de un país le llevan a violar un precinto diplomático de la ONU, encontrando un importante alijo de armas y poniendo así de manifiesto el turbio papel de la organización internacional en África.
La desconfianza que impera entre los africanos progresistas en contra de la ONU les ha llevado a sostener que, en definitiva, era la ONU quien servía las armas a los terroristas. La propia opacidad de la noticia no ha forzado a que el organismo internacional la desmienta y, en cualquier caso, esclarezca lo sucedido y proteste por la violación del precinto.
El setiembre del año pasado el mismo medio ya denunció que el ejército camerunés había capturado a un soldado de las fuerzas especiales francesas que formaba parte de las milicias de Boko Haram en el norte de Camerún, una región limítrofe con Nigeria y Chad.
Esa noticia tiene relación con la más reciente según la cual “antiguos” instructores militares del ejército francés están entrenando a las unidades del Califato Islámico en Siria, lo cual ha sido reconocido oficialmente por el Elíseo.
No obstante, en los nuevos planes represivos que estudia el gobierno francés no entra la incriminación de este tipo de conductas, a pesar del alarde creado en torno a los viajes de otros ciudadanos, como los salafistas autóctonos, a zonas de combate fuera de Francia.
El 4 de septembre del año pasado, tras un ataque del ejército camerunés con armamento pesado contra un campamento de Boko Haram en la localidad de Gambaru, aparecieron los cadáveres de dos extranjeros que, inicialmente, fueron identificados como tuaregs. Finalmente se descubrió que también eran franceses.
En muy pocos meses la cadena Afrique Media, que emite desde Camerún, se ha convertido en uno de los medios con mayor audiencia, tanto en el continente africano como entre la diáspora europea de emigrantes.
Pero no tiene los padrinos de Charlie Hebdo. Por lo tanto, nunca va tener libertad de expresión. El imperialismo francés ya está tratando de silenciarla. El 20 de noviembre se celebró una reunión en el Ministerio de Asuntos Exteriores en París para impedir la continuación de las emisiones.
Poco antes se había producido un corte de la señal que casi nadie interpretó como una avería técnica, lo que promovió un llamamiento de varios medios africanos al gobierno de Camerún en defensa de la cadena de televisión, en contra del imperialismo francés, y de Boko Haram “y de sus poderosos patrocinadores extranjeros”, decía el comunicado (3).
Mientras, todos hemos olvidado hace tiempo a las decenas de niñas que fueron secuestradas en Nigeria por Boko Haram hace meses y que no han aparecido, lo cual resulta más que sorprendente. Es la típica noticia espectacular que llena las portadas de los medios imperialistas cuando les conviene, y luego desaparece, sin que sepamos los motivos ni de una cosa (la aparición) ni de la otra (la desaparición). ¿Les habrán convertido ya al islam o se está demorando el asunto más de la cuenta?
(1) http://www.centraltv.fr/benin-television/afrique-media-tv
(2) https://eburnienews.net/lonu-fournit-elle-boko-haram-en-armes-video-afrique-media/
(3) http://www.cameroonvoice.com/news/article-news-16085.html
Panda de hijos de puta, cuándo dejarán a África tranquila de una puta vez?