Podemos se pelea por las poltronas también en Galicia

Al secretario general de Podemos en Galicia, Breogán Riobóo, le han retirado el sueldo, el teléfono y hasta el correo electrónico, pero él se aferra al cargo como una lapa. Después de desmantelar la comisión de garantías y el consejo ciudadano con una cascada de dimisiones, la dirección regional le ha dejado sin funciones.

La camarilla de Pablo Iglesias apuesta por la diputada Ángela Rodríguez, pero en medio hay una tercera corriente, la de Carmen Santos, que también pide su cacho.

La defensa de la autodeterminación de Galicia realizada por la diputada Alexandra Fernández en el debate de investidura de Pedro Sánchez ha abierto otro frente. El portavoz de la gestora de Podemos en Galicia, el senador José García Buitrón, se desmarcó de la reivindicación, al asegurar que “no es una urgencia”.

La injerencia de la dirección nacional es otro de los motivos de las peleas intestinas, que no son mayores porque 2016 es año de elecciones en Galicia y hay prisa para hacerse con un cargo.

Riobóo rompió con Pablo Iglesias y su camarilla al desmarcarse de la forma en la que se gestionó En Marea y de la propia campaña. Dentro de En Marea Podemos es sólo una parte del gazpacho, del que también forman parte Esquerda Unida o Anova.